" modo singular por el que el Obispo cultiva el encuentro personal con el clero y demás fieles del pueblo de Dios"

Justo antes de concluir los trabajos de la Asamblea Diocesana de Pastoral, realizada en el mes de noviembre del año pasado, uno de los avisos con especial relevancia fue el que hizo el obispo de nuestra diócesis, S.E. Mons. Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, anunció que durante el año 2025 daría inicio a las “Visitas Pastorales”, que dedicaría con especial atención un tiempo necesario para estar en cada parroquia, con los fieles, con los sacerdotes y con quien fuera necesario acudir.
¿Por qué con especial ánimo y anhelo el obispo espera este acontecimiento de visita pastoral a su diócesis?
Para ello es necesario decir que: "La Visita Pastoral es uno de los modos ciertamente singular, por el que el Obispo cultiva el encuentro personal con el clero y demás fieles del pueblo de Dios,

para que los conozca y dirija, los exhorte a una vida de fe y de practica cristiana, así como para que vea de cerca y valore en su real eficacia las estructuras e instrumentos destinados a su servicio pastoral" (AS, 226c). Es así que debe asegurarse que este sea un momento de especial cercanía y atención, ya que le permitirá al Obispo identificar los esfuerzos y logros de la comunidad parroquial, pero también conocer las áreas que requieren de más atención y apoyo urgente, en lo que refiere al servicio y cuidado pastoral de la feligresía, lo espiritual, la atención a los espacios físicos, si fuera necesario.
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Si las circunstancias lo permiten, el obispo debe celebrar la Misa, conferir el sacramento de la Confirmación.., reunirse con el Consejo pastoral y con el Consejo para asuntos económicos, reunirse con los niños y jóvenes que hacen catequesis, visitar las escuelas y otras obras e instituciones católicas que dependen de la parroquia y visitar a algunos enfermos de la parroquia, (Directorio para el Ministerio Pastoral de los Obispos). La visita pastoral también tiene un carácter misionero, ya que el obispo anima a los fieles a vivir su fe de manera activa y a participar en la evangelización. Se busca que cada miembro de la comunidad se sienta llamado a ser un testigo del Evangelio en su entorno.
¿Qué implican estas visitas para el Pueblo de Dios?
Podemos señalar algunas con especial amplitud, pues cada Diócesis, e incluso cada parroquia puede tener una realidad muy concreta…
Encuentro Personal: La visita permite un encuentro personal entre el obispo, los clérigos, consagrados, consagradas y los fieles, lo que ayuda a construir relaciones más cercanas y a fomentar un sentido de pertenencia a la comunidad de la Iglesia.
Refuerzo de la Autoridad Pastoral: A través de la visita, el obispo reafirma su misión pastoral y su compromiso con el cuidado espiritual de la diócesis. Esto es esencial para el ejercicio de su ministerio, ya que los fieles ven en él a un pastor, a ejemplo de Cristo, que se preocupa por su rebaño, ayudándolo para que no caiga en las garras del maligno enemigo.
Fomento de la Participación Laical: La visita pastoral también implica la participación activa de los laicos en la vida de la Iglesia. El obispo puede motivar a los fieles a involucrarse en diversas actividades y ministerios, promoviendo así una Iglesia más viva y activa, o bien, podemos decir, toda ella ministerial y sinodal.
Para concluir debemos anotar que la visita pastoral, es una de las formas, confirmada por siglos de experiencia, con la que el Obispo mantiene contacto personal con el clero y con todos los fieles, contribuye a la renovación de la propia vida cristiana y a una acción apostólica más intensa.
Con ánimo y esperanza renovada, esperemos la presencia de nuestro pastor diocesano en cada una de las parroquias de nuestros once decanatos, que Jesús, Buen Pastor, asista con sabiduría a nuestro obispo S.E. Mons. Víctor Alejandro Aguilar Ledesma y que el pueblo de Dios vea este acontecimiento como un acto de su divina providencia.
Por: Pbro. Eduardo Sánchez Ramírez
Pastoral para la Comunicación
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